Centro gerontológico de Arenillas.
Cuanto daría un anciano por volver a su juventud, esta premisa no la comprenden los jóvenes, cuanto dieron los mayores por ver a sus retoños surgir, todo lo que dieron cuando fueron jóvenes, lo dejaron plasmado para que los habitantes de hoy disfruten de sus creaciones.
Nadie puede negar que los resistentes a las diferentes vicisitudes de la vida, lo dieran todo a cambio de nada, hoy se arrepienten algunos de haber colaborado para que una ciudad crezca, porque nadie les entiende, no les comprenden, ni siquiera les respetan, pisotean sus criterios y anulan sus derechos.
Me refiero a los seres queridos de la edad dorada, que hoy en día reclaman por sus derechos y que son pocos los que les escuchan, las buenas obras también se deben copiar, por decir en algunas ciudades ya se ve que los ancianos aunque no son todos, disfrutan a plenitud su vejez, porque alguien se apiadó de ellos y les construyeron un centro de esparcimiento.
En Machala por ejemplo no todos los ancianos tienen el privilegio, se rumora que solo los que alguna vez fueron notables tienen la oportunidad de gozar de las bondades del centro para abuelos, si usted visita la capital, verá que hay muchísimos en las calles pidiendo limosna, desamparados y otros aborrecidos por su propia familia.
En Huaquillas también existe un centro, que no alberga a todos, sino a una parte de los ancianos de la frontera, no es porque no los quieren recibir; sino, porque algunos no saben de la existencia de este centro, y otros porque son rebeldes y a pesar que los invitan a compartir momentos de viejas costumbres, no les da la gana de asistir.
En Arenillas; la Sra. Carreño, Reina Vitalicia de los ancianos siempre hace agasajos públicos, parece que ninguna autoridad quiere reconocer la valía de los que en aquella época ofrecieron su juventud para ver a su Arenillas en el sitial que ahora está, los Arenillenses, “no todos son insensatos”, la mayoría tiene mucho afecto por los viejitos, pero lamentablemente los políticos parece ser que poca importancia le dan a sus longevos.
Habiendo locales que bien pueden servir como albergue o lugar de esparcimiento, no hacen nada por reconstruir para que los veteranos puedan reunirse y contar sus historias, lo cierto es que ojalá llegue a buenos oídos este lamento, y se tome la decisión de construir ya el Centro Gerontológico de Arenillas. Tal vez la decisión salga del municipio, que creo que si saben valorar los esfuerzos de los octogenarios gestores del desarrollo.
No estamos incitando a la discordia, sino exigiendo a las autoridades que cumplan con su rol para el que fueron elegidos, gobernar para todos, no solo para los que representan votos, porque algunos ya rumoran que como los viejos no votan para que atenderlos; esa es una inmadurez política, tal vez ellos piensan que nunca llegaran a viejos, y si así fuere, por lo menos dejen una obra que los recuerde por siempre.
Sería plenísimo; que después de diez años digan, gracias a &%(&/(%·!”&=&”, los nonagenarios cuentan con un centro.
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